Fases de la respuesta sexual masculina

respuesta sexual masculina

La respuesta sexual humana hace referencia al proceso de reacción de mente y cuerpo ante un estímulo de carácter sexual. Es una secuencia dividida en etapas (deseo, excitación, meseta, orgasmo y resolución) que, por lo general, se expresa de forma diferente en hombres y en mujeres. Mientras que la respuesta sexual masculina responde a un patrón fijo como veremos más adelante, en las mujeres, estas etapas no atienden necesariamente al mismo patrón.

Etapas o fases de la respuesta sexual masculina

Deseo

Esta etapa ocurre a nivel mental. Determinados pensamientos, sentimientos y/o sensaciones despiertan algún tipo de impulso sexual, que origina la apetencia o la necesidad de buscar placer.

Los estímulos que generan este deseo sexual pueden ser muy variados e ir desde un simple roce hasta un simple olor o sonido.

Durante esta fase no se producen cambios fisiológicos evidentes en el hombre.

Excitación

Como parte de la respuesta sexual masculina a la anterior etapa de deseo, el cuerpo induce a la liberación de hormonas y feromonas y se producen ciertos cambios físicos y psíquicos.

Por un lado, a nivel psicológico, esta fase se caracteriza por un creciente aumento de las sensaciones placenteras.

Por otro lado, a nivel físico, comienzan a darse grandes cambios:

  • La piel se ruboriza
  • El pene se endurece, produciendo una erección
  • Se produce un engrosamiento del escroto y la elevación de los testículos
  • Las glándulas de Cowper producen líquido preseminal para favorecer la lubricación
  • Erección de los pezones

Por descontado, si el nivel de deseo es elevado, la etapa de excitación se producirá de una forma más rápida e intensa. Si de lo contrario, el deseo es bajo, la excitación podría no ser suficiente como para que se sigan desarrollando las siguientes fases de respuesta sexual.

Meseta

En la etapa de meseta, la excitación se intensifica y mantiene a través de la estimulación física de las zonas erógenas y la penetración así como de la estimulación psicológica.

La fase de meseta predispone a la siguiente etapa (orgasmo) de respuesta sexual masculina y tiene una duración indefinida puesto que depende casi por completo de los implicados en la relación sexual. A menudo, esta fase se extiende de forma intencionada buscando la acumulación de la mayor tensión sexual posible lo que suele intensificar la siguiente fase.

En esta etapa se dan cambios tanto psicológicos como fisiológicos:

  • Liberación de endorfinas
  • Aceleración del ritmo cardíaco y la respiración
  • Aumento de presión sanguínea
  • Engrosamiento del pene (alcanzará su máximo tamaño y grosor justo momentos antes del orgasmo)
  • Oscurecimiento del miembro
  • Aumento del tamaño de los testículos
  • Mayor secreción de las glándulas de Cowper
  • Sensación de presión y calor interno
  • Tensión muscular

En este momento entre fases, se producen también contracciones musculares de especial intensidad (en la uretra, el ano, la próstata y las vesículas seminales) para provocar la eyaculación.

Orgasmo

Cuando la excitación llega a su máximo, la respuesta sexual masculina desencadena la penúltima fase y la más breve de todas: el orgasmo.

En esta explosión final, se libera toda la tensión acumulada en la fase de meseta y en la que el cerebro libera una enorme carga de endorfinas que intensifican la sensación de placer. A nivel físico, se producen los siguientes eventos:

  • Contracciones en la uretra y el pene (sensación de inevitabilidad de eyacular o lo que es lo mismo: que el orgasmo es inevitable e inminente)
  • Contracciones del ano, la próstata y las vesículas seminales que inducen la eyaculación
  • Sensación de calor en la uretra conforme sale el semen por ella al exterior

Resolución

Una vez pasado el orgasmo, el hombre entra en fase de resolución. Durante esta etapa, los órganos genitales y los músculos se relajan volviendo a su estado anterior (previo a la fase de deseo).

Psicológicamente, se produce una sensación generalizada de bienestar y relajación.

Periodo refractario de la respuesta sexual masculina

Esta sería la última etapa de la respuesta sexual en hombres y que en mujeres no se da.

Durante la eyaculación, los hombres liberan un cóctel de sustancias químicas cerebrales entre las que se encuentran norepinefrina, serotonina, oxitocina, vasopresina, óxido nítrico y la prolactina. Es esta última la responsable de reprimir la dopamina, consiguiendo así disminuir el deseo y aumentando la somnolencia y la sensación de satisfacción sexual.

Durante la fase de periodo refractario, los hombres no pueden afrontar un nuevo coito. Cabe señalar que la duración de este periodo o varía enormemente de un sujeto a otro.