La salud íntima masculina es un tema de suma importancia que, a menudo, queda relegado por tabúes o vergüenza. Sin embargo, la detección precoz de cualquier anomalía es crucial para un tratamiento efectivo. Una de estas afecciones que requiere atención inmediata, es la Eritroplasia de Queyrat. Se trata de una lesión precancerosa que, si no se trata, puede evolucionar hacia un carcinoma invasivo.
En este artículo encontrarás información detallada sobre esta condición, desde sus causas y síntomas hasta los tratamientos disponibles y su pronóstico.
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¿Qué es la eritroplasia de Queyrat?
La Eritroplasia de Queyrat (EQ) es una lesión precancerosa que se localiza específicamente en la mucosa del pene, es decir, en el glande, y con menos frecuencia, en el prepucio interno, en la cual las células anómalas se encuentran confinadas en las capas superficiales de la piel y no han invadido tejidos más profundos.
Se manifiesta como una o varias placas o manchas de color rojo brillante a aterciopelado, de bordes bien definidos y superficie lisa, húmeda y a veces algo erosionada. Histopatológicamente, es idéntica a la enfermedad de Bowen, que es el término utilizado cuando esta misma lesión precancerosa aparece en otras partes del cuerpo. Por lo tanto, la Eritroplasia de Queyrat es esencialmente la enfermedad de Bowen que afecta a las mucosas del pene.
Causas y factores de riesgo
La causa principal y más importante asociada al desarrollo de la Eritroplasia de Queyrat es la infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH). Este virus altera el ciclo normal de las células de la piel, provocando un crecimiento anómalo y descontrolado que puede derivar en displasia y, eventualmente, en cáncer.
Además existen algunos factores de riesgo que aumentan significativamente la probabilidad de desarrollar esta afección, como por ejemplo la edad (más común entre los 40 y 70 años), o tener un sistema inmunológico debilitado, y los hombres no circuncidados tienen un riesgo mucho mayor de padecerla. La fimosis es otro factor importante, pues cualquier fuente de irritación continua en la zona del glande y el prepucio puede ser un factor contribuyente para desarrollar esta condición.
¿Cómo saber si tengo eritroplasia de Queyrat?
El síntoma principal y casi exclusivo es la aparición de una lesión visible en el glande, el prepucio o, aunque rara vez, en la uretra. Las características de esta lesión son una mancha solitaria, de color rojo intenso y de aspecto aterciopelado, generalmente de superficie lisa, húmeda y bien delimitada. A veces está acompañada de pequeñas erosiones o un leve sangrado al roce y puede variar desde unos milímetros hasta varios centímetros de diámetro. Es asintomática, pero algunos hombres pueden reportar picor leve, ardor, o sensibilidad en la zona.
¿Esta afección duele desde el inicio?
No, generalmente no duele en sus etapas iniciales. Suele ser una lesión indolora y la ausencia de dolor es uno de los motivos por los que los pacientes pueden retrasar la consulta médica, por no percibirla como un problema urgente. El dolor, el ardor o las molestias significativas suelen aparecer en fases más avanzadas.
Evaluación médica y diagnóstico
Ante la sospecha de cualquier lesión en el pene, la consulta con un urólogo o un dermatólogo es crucial. En el proceso diagnóstico, el médico analizará el historial clinico, preguntará sobre los síntomas, hábitos de higiene, historial sexual y factores de riesgo. Además examinará la lesión, y hará una dermatoscopia que puede orientar hacia el diagnóstico de una lesión precancerosa.
Por ultimo se hará una biopsia y luego de analizarla, el patólogo confirmará la presencia de displasia o carcinoma y descartará una invasión profunda. La biopsia es crucial para planificar el tratamiento correcto.
¿Cómo se trata la eritroplasia?
El objetivo del tratamiento es eliminar por completo las células precancerosas. La elección del método depende de las características de la lesión y de la preferencia del paciente y del médico.
Cirugía y técnicas de escisión
Las técnicas principales son la escisión quirúrgica convencional, en la que se extirpa la lesión con un margen de seguridad de tejido sano, muy efectiva y permite el análisis patológico completo de los bordes, pero puede requerir cirugía reconstructiva; y la cirugía de Mohs, que permite maximizar la conservación de tejido sano y tiene las tasas más altas de curación. Es ideal para lesiones grandes o en ubicaciones complejas.
Tratamientos destructivos o ablativos
Otras opciones son la terapia láser (Láser de CO2), donde el láser vaporiza las células anómalas con gran precisión. Este procedimiento causa menos sangrado y una cicatrización generalmente buena, pero no permite analizar el tejido extirpado. Y la crioterapia, en la cual se utiliza nitrógeno líquido para congelar y destruir el tejido anómalo. Es un método efectivo para lesiones pequeñas, pero puede ser doloroso y dejar una zona despigmentada.
Tratamientos tópicos
Algunas lesiones se pueden tratar con tratamientos tópicos. Generalmente se usa Imiquimod 5%, que estimula el sistema inmunológico local para que ataque y destruye las células displásicas y el VPH. O también 5-Fluorouracilo (5-FU), que destruye las células de rápido crecimiento. Su uso es menos común que el imiquimod para esta localización debido a la irritación severa que puede causar en la mucosa.
Qué pasa si no se trata: Pronóstico y complicaciones
El mayor riesgo de no tratar la Eritroplasia de Queyrat es su transformación en un carcinoma de células escamosas invasivo. Se estima que entre un 5% y un 33% de las lesiones no tratadas pueden volverse cancerosas invasivas con el tiempo. Una vez que el cáncer invade tejidos más profundos, el tratamiento se vuelve más agresivo (puede requerir penectomía parcial o total), y existe el riesgo de que se extienda a los ganglios linfáticos y a otros órganos, lo que compromete gravemente la salud y reduce drásticamente las tasas de supervivencia.
Por ello, el diagnóstico y tratamiento tempranos son fundamentales para obtener una curación completa y evitar graves complicaciones.
¿Puede afectar la fertilidad o la capacidad de tener relaciones sexuales?
Esta condición no afecta directamente a la fertilidad, pues no altera la producción de espermatozoides en los testículos ni la calidad del semen. Sin embargo, los tratamientos agresivos podrían afectar la eyaculación. Además, la lesión, al ser frágil, puede sangrar o causar molestias durante las relaciones. Y después del tratamiento, puede haber una etapa de recuperación donde se desaconsejen las relaciones. Sin embargo, en la mayoría de los casos, una vez curada la zona, la función sexual se preserva por completo, pues los tratamientos buscan minimizar cualquier impacto en la sensibilidad y la función del pene.
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¿Se puede prevenir?
Si bien no es 100% prevenible, se pueden tomar medidas muy efectivas para reducir el riesgo, como la circuncisión, la buena higiene, la vacunación contra el VPH, el uso de preservativo, y la autoexploración y consulta precoz, que es vital para una detección temprana.
Preguntas frecuentes (FAQs)
¿Eritroplasia de Queyrat es contagioso?
La lesión en sí no es contagiosa. Sin embargo, el VPH subyacente sí lo es y se puede transmitir por contacto sexual. Por eso, es importante que la pareja sexual consulte con un ginecólogo para su evaluación.
¿La enfermedad de Bowen es lo mismo que la eritroplasia de Queyrat?
Sí, son la misma enfermedad a nivel celular. La diferencia es puramente de localización. Se llama Eritroplasia de Queyrat cuando aparece en la mucosa del pene, y enfermedad de Bowen cuando aparece en la piel queratinizada del resto del cuerpo.
¿Se puede curar completamente?
Sí, la Eritroplasia de Queyrat tiene una alta tasa de curación cuando se trata de manera adecuada y temprana. El pronóstico es excelente, pues su extirpación completa equivale a la curación. No obstante, requiere seguimiento médico periódico por el riesgo de recurrencia en la misma zona o de desarrollar nuevas lesiones.
¿El tratamiento deja cicatrices en el pene?
Cualquier procedimiento que remueva tejido puede dejar alguna cicatriz. Sin embargo, las técnicas modernas (como el láser o la cirugía de Mohs) están diseñadas para ser lo más conservadoras posible y minimizar las secuelas estéticas y funcionales. La cicatriz suele ser superficial y se atenúa con el tiempo.
¿Qué tan rápido progresa esta lesión si no se trata?
La progresión es impredecible y variable. Puede permanecer estable durante años o progresar a un cáncer invasivo en un período más corto, en meses o pocos años. Por eso, la actitud más segura siempre es tratarla.
Prevención y tratamiento de la eritroplasia de Queyrat en Clínica Doctor T
Esta lesión precancerosa parece una irritación sin importancia que si no se diagnostica y trata a tiempo, puede evolucionar hacia un cáncer de pene.
En Clínica Doctor T, centro especializado en salud sexual masculina, abordamos esta condición con un enfoque integral. Nuestros especialistas realizan una valoración clínica detallada y tratamientos personalizados para controlarla.
En Clínica Doctor T te ayudamos a cuidar tu salud sexual y a prevenir riesgos asociados que afecten tu fertilidad, salud sexual y estilo de vida. Agenda tu consulta y actúa a tiempo: tu bienestar y seguridad son nuestra prioridad.
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Conclusión
La Eritroplasia de Queyrat es una afección urológica seria que representa una lesión precancerosa en el pene. Aunque suele ser asintomática, sus signos visibles son una señal de alarma que no debe ser ignorada. El diagnóstico es sencillo y el abanico de tratamientos disponibles en la actualidad es amplio y efectivo. La consulta urgente con un especialista ante cualquier anomalía es esencial para lograr una curación completa, preservando así la salud y la función sexual a largo plazo.
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